El pan elaborado con masa madre se está volviendo cada vez más popular, es delicioso, nutritivo y fácil de digerir.
El pan con masa madre es el pan de verdad, de hecho, se hace con solo 4 ingredientes, harina, agua, sal y bacterias de levadura. El proceso comienza con la producción de un iniciador de masa fermentada, que fermenta lentamente de la manera tradicional sin usar levadura comercial. La masa madre se puede hacer usando harinas de pan individuales o varias combinaciones de harinas (espelta, trigo o centeno).
Una fermentación natural requiere más tiempo y atención que para hacer un pan comercial. La masa se hincha durante horas e incluso durante algunos días por algunos panaderos. Durante este proceso, el panadero constantemente ‘alimenta’ la masa con harina y agua.
Esta forma de elaboración es de las más antiguas que se conocen. El registro más antiguo se remonta a 3.700 AC, pero su origen probablemente esté relacionado con los comienzos de la agricultura en el periodo neolítico.
En comparación con otros tipos de panes, el pan con masa madre tiene una mayor densidad. Su corteza es más gruesa y crujiente, su miga es más irregular y elástica y posee un olor característico ligeramente más agrio debido a la formación de alcohol durante la fermentación.
Otro gran beneficio del pan de masa madre es su mayor vida útil. Un pan bien elaborado con masa madre, se conserva mucho mejor que un pan hecho con levadura de panadería.
Un pan de masa fermentada se puede mantener en muy buenas condiciones durante una semana sin problemas ya que el proceso de fermentación elimina las bacterias malas y previene el crecimiento de moho. El pan de levadura normal, por lo contrario, a menudo se pone rancio en un día.
Los panes de masa madre también son una gran fuente de minerales, tales como el hierro, esencial en la producción de glóbulos rojos y del metabolismo energético, el selenio que protege nuestro sistema inmunológico, nuestras células y nuestros tejidos y el zinc, imprescindible para que el sistema inmunitario funcione de la manera adecuada.
La masa madre también es rica en vitaminas del tipo B que ayudan al proceso para obtener energía de los alimentos que se consumen. La ausencia de vitaminas B6 y B12 puede causar anemia.
Igualmente, su alto contenido en fibra aporta numerosos beneficios para el cuerpo como mejorar la digestión y promover la salud intestinal. De hecho, se aconsejable consumir alimentos con un alto contenido en fibra para asegurarse de prevenir problemas digestivos como el estreñimiento y la hinchazón. Por lo tanto, consumir pan de masa madre junto con frutas y verduras es buena manera de mantenerse sano.
Diferentes tipos de elaboración de panes de masa madre
Variados tamaños, recetas tradicionales e innovadoras crean una oferta variada de pan de masa madre. En fricopan hacemos Panes 100% ecológicos y naturales, con ingredientes de cultivo ecológico, aquí te damos algunos ejemplos que te sorprenderán.
Pan BIO de girasol
Pan de miga jugosa y con el sabor peculiar que le confieren las pipas de girasol. Las semillas de girasol son ricas en fibra, sales minerales, magnesio y también son una buena fuente de vitaminas B y E. Elaborado con Harina (Harina de trigo 33%, harina integral de centeno), agua, masa fermentada natural (harina de centeno y agua), semillas de girasol 13%, sal de mesa yodada, levadura y espesante goma guar.
Pan BIO de Centeno trigo
Pan muy apetitoso que sorprende tanto por su sabor y textura, como por su prolongada conservación. Dado que se produce con levadura madre, la preparación de este pan es muy lenta debido a sus largos tiempos de crecimiento. Aunque es algo ácido, es muy sabroso, contiene mucha humedad y un color oscuro. Su corteza es crujiente y bastante gruesa, mientras que la miga es abundante y compacta. Elaborado con Harina ecológica (Harina de trigo 26%, Harina integral de centeno 18%), agua, masa fermentada natural (harina integral de centeno 10%, agua), sal, levadura. Espesante goma guar.
Pan Bio de cereales
Pan rico en semillas y proteínas, con sabor a nueces. Este pan es la solución perfecta para disfrutar del sabor único del pan, sin comprometer la dieta. Elaborado con Harina de cereales (Harina de trigo 35%, Harina de centeno 6%), copos de avena 3%, agua, masa madre natural de centeno, linaza, sal yodada, levadura, goma espesante guar, amapola, sésamo, pipas de calabaza y girasol.
Pan de masa madre de centeno
Ideal para llevar una dieta rica en fibra, sabroso, aromático, saludable y fácil de digerir La harina de centeno, además de ser un alimento nutritivo y saludable, está muy extendida en los países del norte de Europa y, en general, en aquellos con climas muy fríos, porque el centeno es más resistente que el trigo en condiciones climáticas desfavorables. Con la harina de centeno, la masa adquiere una consistencia más compacta que la que se hace con la harina de trigo. También conserva su suavidad por más tiempo porque se seca menos rápido. Elaborado con Harina de centeno, agua, masa madre natural (harina de centeno, agua), sal yodada, levadura, gluten de trigo, espesante goma guar.
Pan de montaña
Este es un pan suave y equilibrado en su sabor, con una corteza tostada. Pan rustico con un corte vertical ideal para tomar en cualquier momento. Elaborado con Harina de centeno 20%, harina de trigo 22%, agua, masa madre natural (Harina de centeno 11%, agua), sal yodada, levadura, espesante goma guar y malta tostada de cebada.
Pan de espelta integral
La harina de espelta es un alimento altamente proteico, pero con menos calorías que otros tipos de cereales. Es particularmente adecuado para aquellos que no digieren el pan clásico hecho con harina de trigo (sin embargo, no es apto para celíacos). La harina de espelta contiene mucha fibra, y por esta razón tiene un poder altamente saciante y ligeramente laxante. Elaborado con harina integral de espelta 50%, agua, masa madre natural (harina de centeno integral, agua), semillas de girasol, copos de avena, linaza, sésamo, jarabe de remolacha, sal y levadura. Comer panes de masa madre es mucho más saludable por sus equilibrios nutricionales, sin mencionar el placer que se obtiene al saborearlo.