El sector de la alimentación cuenta con unos rasgos singulares que lo hacen diferente a los demás. Hablamos de elementos como la caducidad de los productos o el deterioro de los mismos durante su almacenamiento. Todo ello provoca que la cadena de suministros deba tener un comportamiento óptimo, igual que la gestión de los almacenes.
La cadena de suministros alimentarios en el sector de la distribución
La diferenciación de este sector se ve reflejada en la cadena de suministros. La complejidad del mismo, con una amplia competencia y unos márgenes de beneficios escasos, ha hecho que las compañías miremos hacia las cadenas con el objetivo de optimizarlas.
En ocasiones, la transmisión de mercancía entre los diferentes actores puede parecer algo complejo, pero un buen análisis puede conllevar grandes beneficios. Un intercambio de información fluida puede asegurar tener un almacén más eficiente, donde el stock sea el mínimo necesario para un buen funcionamiento.
La trazabilidad de los productos en la cadena de distribución de alimentos
Dentro de la cadena la trazabilidad se ha vuelto fundamental. Este concepto hace referencia a la posibilidad de seguir el rastro a un alimento en todas las etapas por las que transcurre el proceso de elaboración y distribución.
Nos importa este concepto, ya que es el responsable de asegurar que todas las etapas se han gestionado correctamente. Esto significaría que el producto está en perfectas condiciones.
La elección del proveedor es un aspecto clave
A la hora de asegurar la trazabilidad de los productos es fundamental elegir con éxito al proveedor, pues su buen hacer repercutirá en la distribución de los alimentos. Estos son algunos aspectos que hemos de tener en cuenta:
– Proceso de selección: a la hora de elegir es necesario escuchar más de una propuesta y tener claras las exigencias que vamos a solicitar.
– Certificaciones: existen organismos internacionales que otorgan veracidad a los procesos de seguridad con los que cuenta el proveedor.
– Evaluación y reevaluación: es necesario mantener una constante evaluación del proveedor con el objetivo de asegurar su correcto funcionamiento año tras año.
– Valoración conjunta: a la hora de elegir un proveedor no hay que fijarse solo en el precio, sino que debemos mirar más allá para conseguir todos los objetivos previstos.
La problemática del almacenamiento de alimentos
Asegurar un correcto funcionamiento de la cadena de suministro reduce la problemática del almacenamiento de los alimentos. Gestionar los stocks correctamente implica una reducción de la pérdida de producto, es decir, de dinero.
Una buena limpieza, una correcta colocación, un método de control eficiente y una previsión acertada de las compras y las ventas son factores que nos ayudarán a lograr el objetivo.
No debemos olvidar, en el caso de alimentos congelados o refrigerados, la importancia que tiene el transporte y la correcta gestión de la cadena de frío.
Calificación de las existencias
Para tener un correcto control del almacén, uno de los elementos clave es entender que las existencias son dinero. Para ello es imprescindible someterlas a una buena valoración.
Entendemos por existencias aquellos activos que vayan a ser consumidos o vendidos en el correcto desenvolvimiento de la empresa. Para valorarlas distinguimos dos grupos:
– Materias primas: tienen una valoración en función de su coste de adquisición.
– Materias elaboradas: se trata de la suma del coste de adquisición más el coste de producción generado.
En ambos casos es necesario reducir el valor de la depreciación a la que se ha visto sometido el producto. En muchas ocasiones viene derivado del tiempo destinado en el almacén y es el factor que debemos eliminar para obtener el máximo beneficio.
La confianza y la seguridad son capitales en el sector
El sector de la alimentación requiere un clima de confianza entre los diferentes participantes en su cadena. Al mismo tiempo resulta imprescindible una buena gestión del almacenamiento de los productos que evite su depreciación. Contar con proveedores de confianza y que ofrezcan la seguridad alimentaria exigible es fundamental para el crecimiento de la empresa.
En Fricopan, somos consciente de todos estos condicionantes y por ello, ponemos nuestro máximo interés en facilitar todo lo posible la relación comercial con nuestros distribuidores.
Por ello intentamos diseñar soluciones que ayuden que faciliten a nuestros clientes el acceso a amplia nuestra gama de productos.
Una de estas soluciones es la posibilidad del envío de palets de productos combinados donde el cliente pueda personalizar el surtido que va a recibir.
Esto tiene numerosas ventajas, facilita la rotación de stock, permite el mantener stocks mínimos, inversiones de poco riesgo, flexibilidad a la hora de pedir el genero según necesidades y una entrega en 48 a 72 horas.
Estos pedidos están formados por 54 cajas surtidas de panes y 28 cajas entre panecillos, tarta, bollería, etc.
Son muchos los clientes que disfrutan de esta posibilidad que cada día tiene más aceptación y que estamos muy felices de poder ofrecer.
Si desean más información pueden ponerse en contacto y estaremos encantados de resolver cualquier duda que puedan tener.